Este joven ecuatoriano perdió a sus padres por trágicos motivos: su madre, víctima del cáncer y su padre, víctima de la violencia que azota el país. Estos dos terribles acontecimientos, sacaron lo mejor de sí mismo y le enseñaron a adaptarse a la adversidad con optimismo. Así creó la Fundación Cecilia Rivadeneira, que apoya a niños con cáncer y a sus familias, y comenzó una brillante trayectoria donde fomenta la solidaridad, la creatividad y el emprendimiento en todo lo que hace.