
Licenciado en educación física y deporte, actualmente director técnico nacional de la Federación Portuguesa de Rugby, siempre con una actitud profesional para el rugby, deporte y la vida. Sabe apreciar el valor de cada una de las victorias y la alegría de hacer el trabajo bien hecho y asegura que el gran campeón es el que se levanta más rápido de su propia caída asumiendo la obligación de ser riguroso y exigente consigo mismo, aceptando la responsabilidad de un pacto emocional que nadie tendrá el coraje de romper.